domingo, 25 de septiembre de 2011

Pat Patriot

Pat Patriot fue un personaje que tuvo cierto éxito a principios de los años 40, e hizo se debut en Daredevil Comics # 2 en agosto de 1941, era una luchadora idealizada y patriotica, que surgió como complemento de Daredevil (no el de Marvel) y estaba publicado por la editorial Levy Gleason Publicartions.
El personaje vestia con los colores de la bandera americana y fue creada por los guionistas Charles Biro y Bod Wood, mientras que en la parte gráfica estaba Chuck Woodrow.
Patricia Patrios fue vista por primera vez en una cadena de montaje de aviones, haciendo su parte en la guerra a pesar de que los EE.UU. no estaban involucrados en la misma, el trabajo era tan duro y exigente que otra chica que trabajaba en la fábrica se derrumbó por el esfuerzo. Pat se quejó al capataz de la dureza del trabajo y fue despedida, con la excusa de que no se esforzaba en el trabajo.
A pesar de perder su trabajo, esa noche actuó en una obra teatral para aficionados, como si no hubiera pasado nada, de camino a su casa y todavia con el traje de la función, que era una versión femenina del "Tio Sam", ella y su novio pasan cerca de la fábrica donde habia trabajado, cuando advirtió que en la puerta habia un matón.


A Pat le picó la curiosidad y tras desprenderse del guardia, entró justo a tiempo de frustrar el robo de un motor experimental por parte de las siniestras fuerzas del eje, encabezado por el capataz que la despidió. Tras declarar en la policia y firmar con su nombre, este se hace en parte ilegible y pasa a ser Pat Patriot, empleándose a fondo contra saboteadores y demás amenazas al sueño americano.

Pat no tenia ningún tipo de poderes, simplemente era más valiente e inteligente que sus rivales.
El dibujo de Chuck Woodrow tenia una composición de viñeta muy original e innovadora para la época, aunque los guiones eran un poco cursis y sensibleros, de hecho el persnaje fue conocido como la Juana de Arco americana.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

El tiempo en sus manos

THE TIME MACHINE
USA 1960
Director: George Pal.
Productora: MGM
Productor: George Pal.
Guión: David Duncan, según la novela de H.G.Wells.
Fotografía: Paul C. Vogel.
Música: Russell Garcia.
Decorados: George W. Davis.
Efectos especiales: Gene Warren, Tim Barr, Wah Chang.
Intérpretes: Rod Taylor, Whit Dissel, Sebastian Cabot, Alan Young, Yvette Mimieux, Doris Lloyd.
Duración: 103 minutos . Color.

Con la versión cinematográfica de La máquina de tiempo de H.G.Wells, George Pal cerraría su periodo más fructifero e interesante, el que comenzara en 1950 a partir de Con destino a la Luna, para convertir toda la década siguiente en una brillante sucesión de grandes clásicos de la ciencia ficción y la fantasia, producidos por él mismo.
Protagonizado por un todavía juvenil Rod Taylor, El tiempo en sus manos se distanciaba, como era de esperar, del original literario en su tono de pura aventura, conservando casi todos los incidentes de la novela pero evitando en buena parte el pesimismo y cinismo de la obra de Wells, dentro de la tónica amable habitual de las produciones de Pal.

Sin embargo y al contrario que en su anterior adaptación de Wells, La guerra de los mundos (1953), Pal y su guionista decidieron conservar la ambientación victoriana propia de la novela, poniendo especial cuidado en el diseño, totalmente Art Nouveau, de la máquina que utilizará el protagonista para desplazarse al  futuro, encontrando un mundo divido entre los subterráneos y canibales Morlocks y los decadentes y rubios habitantes  de la superficie, condenados a servir de alimento a los primeros.

Otro de los detalles que distinguió la versión de Pal del clásico de Wells, consistió en convertir al cientifico protagonista en un tipo atlético y aventurero. Un cambio que se debió tanto al estilo del director como a la intervención del mismo Taylor, auténtico fan de la novela y quien compartia con Pal la idea de que en realidad, el verdadero protagonista de La máquina del tiempo no podia ser otro que su creador H. G. Wells, lo que finalmente se insinuó en la pelicula al colocar, en el modelo pequeño de la máquina que aparece en el film una placa que reza "Manufactured by H.G.Wells".


La máquina del tiempo consiguió un Oscar a los mejores efectos especiales para el sello Pal, que contó aquí con sus habituales colaboradores de la MGM, Gene Warren y Wah Chang, además de con la presencia del jefe de maquillaje de los estudios Metro, William Tuttle, a quien se deben los inquietantes Morlocks, con su aspecto brutal y simiesco.
Pal utilizó uno de sus procedimientos favoritos, el de la fotografía ultrarápida, para crear el efecto de viaje en el tiempo y el resultado final fue uno de sus últimos éxitos, además de uno de los grandes clásicos de la ciencia ficción de todos los tiempos.

Muchos años después de su estreno, George Pal, relegado y olvidado ya por la industria de Hollywood, llegaria a plantear un continuación de La máquina del tiempo, en la que Rod Taylor e Yvette Mimieux retomarian sus personajes originales, proyecto que desgraciamente nunca se llevó a cabo.

lunes, 19 de septiembre de 2011

The Invaders

Una de las mejores series de Marvel en la década de los 70 fue The Invaders ( Los invasores), creada por Roy Thomas en agosto de 1975. A Thomas siempre le encantaron los viejos personajes de la Timely, en especial las portadas realizadas por Alex Schomburg, en la que figuraban el Capitán América, La Antorcha Humana Original y Namor, luchando codo a codo contra los nazis. No obstante, pese a aparecer los tres en las portadas, nunca aparecian juntos en el interior.
Thomas decidió rectificarlo y asi pasaron a compartir aventuras, que se establecieron a principios de 1940, poco después del bombardeo por parte de los japoneses de Pearl Harbor. A parte de los tres héroes, estaban sus jovenes acompañantes Bucky y Toro.
Si bien todos estos presonajes fueron creados por otros autores, fueron combinados en equipo por primera vez por Thomas y el dibujante Frank Robbins.
Robbins tenía una larga y variada carrera en el mundo del cómic, que comenzó en la Gran Depresión y se prolongó hasta finales de 1970, alcanzando la fama con su creación para las tiras de prensa del audaz piloto Johnny Hazard.

También fue editor y guionista, en el mundo del cómic-book dibujó para DC: Batman y The Shadow, para Marvel: The Invaders y The Human Fly. Aunque tuvo la mala suerte de dibujar a Batman después de la mitica etapa de Neal Adams y otro tanto le pasó con The Shadow de Mike Kaluta.
El trazado de Robbins era un tanto caricaturesco y no era el adecuado para comic-book, por lo que la serie de los Invasores se resintió, pese a ello y el posterior baile de dibujantes la serie duró cuatro respetables años.


La historia de los invasores que más recuerdo es donde forman equipo con Unión Jack, un superhéroe británico. Juntos luchan contra el malvado vampiro Baron Blood, esta aventura se producia en la nº 8 de la colección y poseia una portada icónica creada por Jack Kirby, además Thomas creó un entorno eficaz donde desarrollar la llegada de Union Jack, como un héroe ya mayor que sale de su retiro para luchar contra los enemigos del mundo libre.
Una estupenda serie que merece ser rescatada del olvido, a ver si Panini se pone las pilas.

sábado, 17 de septiembre de 2011

The Time Travelers

USA 1964
Director: Ib Melchior.
Productota: Dobil, para American International.
Productor: William Redin.
Guión: Ib Melchior.
Fotografía: William Zsigmond.
Efectos Especiales: David Wewit.
Intérpretes: Preston Foster, Merry Anders, John Hoyt, Dennis Patrick, Carol White, Joan Woodbury.

Unos cientificos, que trabajaban en experimentos en principio ajenos a los viajes temporales, tropiezan con el hallazgo casual de una suerte de televisión/puerta con la cual conectan con imágenes del futuro. Sencillamente atravesando ese portal están ya unos millones de años por delante de su siglo.
El porvenir, naturalmente no es un lecho de rosas, se produjo la temida hecatombe fruto de guerras mundiales con artefactos atómicos, la vida "normal" está bajo tierra, contando con un ejército de androides para defenderse de las razas mutantes que pululan por la superficie incordiando a la menor oportunidad y la refencia a los canibales de El tiempo en sus manos (1960) no es una frivolidad.
Al llegar a estos parajes desoladores, los sabios de nuestra era deciden ayudar a sus descendientes en la construcción de una nave cuyo destino sería un colonia modelo "Arca de Noé" dirigida a Alfa Centauro, hipotético lugar donde establecer el comienzo de un nueva vida.
Uno de los eruditos contemporáneos se plantea volver a 1964 con la máquina del tiempo para atreverse a variar la historia y evitar el desastre nuclear, una misión que se revela imposible. La única alteración será la de crear un bucle en cuyo interior irán viajando eternamente los temerarios hombres de ciencia, repitiendo las mismas peripecias una y otra vez.
Sin dudarlo, esta es la pelicula más entonada del asombroso Melchior. Escritor de relatos fántasticos, guionista de algunos titulos nada destacables del genero Repticulus (1962) o Journey to the Seven Planet (1961), ambas bajo el mecenazgo del ahorrativo productor Sidney Pink, pronto se convirtió en realizador de pequeñas muestras de la corriente más sencilla e ingenuista en la ciencia ficción, por ejemplo la incalificable The Angry Red Planet (1961) con el recurso del Cinemagic, un somero celofán de colorines delante del objetivo para ambientar el rojizo paisaje marciano.

Melchior nunca defrauda, si se sabe bien lo que uno quiere ver: un prodigio de imaginación sin freno en un formato menor, una estética comiquera que sonrojaría al minimamente exigente espectador, aunque liberarse de las convicciones adultas, ser cómplice de su cine naif es un ejercicio de regocijante humildad.

martes, 13 de septiembre de 2011

The Black Terror

The Balck Terror es un personaje que apareció por primera vez en Exciting Comics # 9 (enero 1941) y fue publicado por la editorial Nador. Sus creadores fueron el escritor Richard E. Hughes y el dibujante Don Gabrielson. Como dato curioso algunas de sus historias fueron escritas por Patricia Highsmith, antes de convertirse en una aclamada novelista.
El personaje ha pasado por infinidad de editoriales: Eclipse Comics, AC Comics, America´s Best Comics y Dynamite Entertainment.
Este personaje fue uno de los superhéroes más populares de la Golden Age, su oscura vestimenta con una calavera en el pecho, le daban un aspecto terrorifico.
En la década de los 70, Marvel tomó prestados algunos elementos del Terror Negro para crear a The Punisher como su uniforme de negro y el emblema del cráneo, así como tener una personalidad similar.

Su identidad secreta era la del farmacéutico Bob Benton, que experimenta para crear un tónico para ayudar a los enfermos, en el laboratotrio Benton trabajaba con su asistente Tim Roland, debido a un despite de Tim añadió algo llamado "ácido fórmico" que le dijeron que provenia de las hormigas rojas. Despues de recriminarle su despiste por añadir el producto quimico equivocado, Bob inhala los éteres del fórmico y adquiere grandes poderes.


Viendo el potencial de sus poderes recién adquiridos, Bob decidió hacer algo que siempre había soñado, combatir el mal y ayudar a los más debiles, decidiendo convertirse en El Terror Negro.
Convencido de que Bob podia necesitar ayuda para librar su guerra contra el crimen, Tim decidió aspirar los éteres fórmicos y desarrollar los mismos poderes que el Terror Negro. Juntos eran conocidos como los Mellizos de Terror y pasaron a luchar contra las amenazas tanto nacionales como extranjeras a lo largo de la Segunda Guerra Mundial.

 
Con cada paso por una editorial diferente, fueron cambiando al personaje haciéndolo prácticamente irreconocible, pero nos quedamos cuando era un joven luchador idealista y un tanto paranoico.

El Doctor Frankenstein

FRANKENSTEIN
USA 1931
Director: James Whale.
Productora: Universal.
Productor: Carl Laemmle Jr.
Guión: Garret Fort, Edward Faragoh, John L. Balderston según la obra de teatro de Peggy Webling basada en la novela de Mary W. Shelley.
Fotografía: Arthur Edeson.
Música: David Broekman y Charles D. Hall.
Intérpretes: Boris Karllof. Colin Clive, Mae Clarke, Dwight Frye,John Boles, Edward Van Sloan, Frederick Kerr.
Duración: 71 minutos. B/N.

Puede decirse que el célebre relato de Mary Shelley, Frankenstein o el moderno Prometeo, inventado en la quinta ginebrina de Lord Byron la noche del 14 de junio de 1816, se convirtió en una máquina de disparar historias desde que dos años más tarde apareciera publicado en Londres.
La macabra y morbosa fantasía no es una obra maestra de la literatura, pero ha sabido conectar con ocultos mecanismos del incosciente y simbolizar una serie de temores innatos en el hombre. Frankenstein, el monstruo no es sólo un emblemático mito romántico, también lo es de la soledad del hombre moderno, librado a sus propias fuerzas, perversamente creado y posteriormente ignorado por un dios olvidadizo.
Tan sólo cinco años después de su primera publicación, llovieron las adaptaciones teatrales del personaje. Hasta 1900 fueron ocho las versiones entre las que se contabilizaban dos parodias y una comedia musical. Fue el sonado éxito de la versión de Peggy Webling de 1930 la que provocó la carismática adaptación cinematográfica de James Whale. Previamente, el monstruo había sido llevado a la pantalla en tres ocasiones, dos en los Estados Unidos (1910 y 1915) y una en Italia (1920).

En un principio se pensó en Bela Lugosi, entonces en la cumbre de la popularidad por su interpretación de Drácula (1931), para que encarnara al monstruo, pero el húngaro se negó a aceptar el papel alegando que sus admiradores no le reconocerian bajo ese disfraz.
Afortunadamente, los directivos de la Universal  aceptaron la propuesta de Whale y muy ptonto el maquillador Jack Pierce empezó a experimentar sobre la cetrina piel del veterano William Prat, conocido profesionalmente como Boris Karloff.
Fue una suerte, porque nadie como Karloff supo imbuir a la patética criatura esa mezcla de horror y candor insuperable. Años más tarde, en Inglaterra Terence Fisher ofrecería una serie de visiones menos poéticas del mito.
Como si se tratase de una extraña reacción, fueron muchos los elementos para lograr los fascinantes resultados de El Doctor Frakenstein: Karloff y un excelente puñado de actores, Colin Clive, Dwight Frye, John Boles; el trabajo de Pierce, convertido desde entonces en uno de los mejores maquilladores de la industria; el director de fotografía Arthur Edeson que dota a la pelicula de una estudiada iluminación expresionista; los barrocos y torturados decorados de Herman Rosse y la ajustada dirección de Whale.
Con todo, a la Universal el argumento del film le parecia demasiado explosivo, Carl Laemmle padre, tuvo bastantes discusiones con su hijo por esa razón.

La advertencia que Edward Sloan realiza al principio de la pelicula acerca de lo aterradora que puede resultar su visión es hija directa de este miedo antes que un hábil truco publicitario.
Mucho menos moralista que su original literario, el film da comienzo con el robo de un cadaver en un cementerio, el joven doctor Henri Von Frankenstein está tratando de crear vida a través de fragmentos de cuerpos muertos. Un dia se produce un tremendo error, al cual es ajeno el cientifico: su asistente, en lugar de traerle un cerebro sano, le proporciona el de un asesino, y asi la criatura abre los ojos en una noche de tormenta.

Pronto nos daremos cuenta de que Frankesnstein ha creado un monstruo que en su rebelde inconsciencia, asesina al ayudante del doctor y a una niña, cuya muerte es una de las escenas más terriblemente poéticas del film. Finalmente también el monstruo perecerá en un incendio en medio de una aterradora persecución.
Aunque no se trate de la versión más imaginativa del relato de Shelley, ya que fue superada por su secuela La novia de Frankenstein (1935), esta fábula del cientifico que jugó a ser Dios, abre brillantemente las puertas del cine fantástico de los años 30 y 40 y es una de las más bellas e inquietantes muestras del género.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Crisis de identidad

Tomo de Planeta que recoge la serie limitada de siete números publicada en el año 2004, Crisis de Identidad, esta obra fue desarrollada por el escritor Brad Meltzer y el dibujante Rags Morales.
Una tragedia se cierne sobre la JLA, la mujer del Hombre Elástico, Sue Dibny es asesinada a manos de un misterioso villano, que conoce todos los secretos de los héroes y que no dudará en asesinar a sus seres queridos.
El ataque a su privacidad, hará aflorar terribles sucesos ocurridos en el pasado y que tendrán repercusión en el presente, cambiando la percepción que tenemos de los superhombres.
Brad Meltzer crea un guión perfecto, donde desconstruye al superhéroe para hacerlo más humano, imperfecto e inseguro, esta humanización se aleja de los cánones clásicos del género, ya que los héroes son victimas de sus propios actos, lo cual los degrada ante nuestros ojos, y no dudan en cruzar la delgada línea que separa el bien del mal.
Esta obra también funciona como una ejemplar trama detectivesca, donde la comunidad superheroica buscará al villano con todos los medios a su alcance, aunque la identidad del asesino provocará una gran sorpresa y un enorme desasosiego.

En la parte gráfica Rags Morales, emplea un dibujo efectivo y a veces feista, que se adapta como anillo al dedo a la sombria propuesta del guionista, también es cierto que hay páginas brillantes, como la que capta todo el dolor y el sufrimiento de Robin, al ver el cuerpo sin vida de su padre, siendo abrazado por Batman y entre los plieges de su capa, se ve el ojo lloroso del chaval.
Una gran obra, adulta y seria, muy alejada de los tópicos del género y que debe de servir como ejemplo a otros autores, ya que de vez en cuando conviene sacudir los cimientos de los viejos y apolillados héroes de la JLA y hacerlos creibles para las nuevas generaciones, aunque para ello haya que arrastralos por el lodo.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

El hombre con rayos X en los ojos

X-The Man with X-Ray Eyes
USA 1963
Director: Roger Corman.
Productora: Alta Vista.
Productor: Roger Corman.
Guión: Robert Dillon y Robert Russell.
Fotografía: Floyd Crosby.
Música: Lex Baxter.
Montaje: Anthony Carras, Al Bird, Eve Newman.
Efectos especiales: Butler-Grover Inc.
Intérpretes: Ray Milland, Dana Van Der Vlis, John Hoyt, Don Rickles, Harlod J.Stone, Lorie Summers, Vicky Lee.
Duración: 80 minutos, color.

El hombre con rayos X en los ojos narra el desgraciado periplo vital de un cientifico abnegado (Ray Milland en una de sus más grandes interpretaciones), el Dr Xavier. Preocupado por el limitadísimo alcance de visión humana, Xavier desarrola una droga, que vertida sobre los ojos en forma de gotas, permite ampliar el espectro visible por el ojo humano.
El experimento, que aplica sobre sus propios ojos, comienza de forma satisfactoría, ya que después de un tiempo de adaptación en los que Xavier disfruta viendo en cueros a los asistentes a una fiesta, le permiten utilizar su visión de rayos X para el diagnóstico de enfermedades internas.

La progesiva ampliación de la gama de su visión, lleva a Xavier al borde de la locura. El cientifico ve literalmente más alla, ve la luz en su pureza. Incapaz de adaptarse a su nueva visión, Xavier mata por accidente y se ve obligado a huir de la policia, acorralado se refugia en una feria bajo la identidad de Mentalo, un hombre con poderes psiquicos.
Algo después, Xavier viaja a las Vegas, donde obtiene una gran suma de dinero haciendo la vista gorda a su propia falta de honestidad.

Con la justicia pisándole los talones, Xavier llega al punto final de su via crucis, un campamento religioso donde abraza el fundamentalismo cristiano con expeditivos y mutiladores métodos. Este final religioso, a simple vista, parece un golpe de efecto. No es si no el colofón lógico de una aventura mistica, que comienza en el mismo instante en que se inician los experimentos de Xavier.
En ese momento, su malogrado colega de experimento le advierte "Sólo Dios lo ve todo" y Xavier contesta "Sí, pero yo quiero acercarme a él".

El acercamiento a Dios es tan intenso que Xavier llega a ver lo vetado al hombre, por lo que debe de sufrir la penitencia descrita en las escrituras, "si lo que ven tus ojos te ofende arráncatelos", le dice un pastor en el desierto.
Xavier se inmola, arrancándose los ojos, en una imagen impactante por su crudeza, que cierra de forma contundente El hombre con rayos X en los ojos, una obra maestra de Roger Corman.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Marvel se va a la guerra

Martin Goodman (dueño de Marvel) fue uno de tantos americanos preocupados por la agresión de Hitler en Europa, aun cuando el aislacionismo fue la tendencia general en los Estados Unidos hasta el ataque jápones sobre Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941.
La preocupación de Goodman se reflejó en sus comics, que declararon la guerra un año antes que el gobierno norteamericano. El comic-book como medio de propaganda, podía ser modesto, pero el mensaje llegó a la juventud americana cuando los vivaces y violentos héroes de Timely hallaron en la amenaza del fascismo un blanco apropiado para su hostilidad.
Namor se enfrentó a un submarino nazi en el nº4 de Marvel Mystery (febreo de 1940), y tanto él como La Antorcha llevaron a cabo su propia cruzada en el primer número de Human Torch (octubre de 1940). Ambos rivales apartaron su eterna enemistad, para luchar conjuntamente contra las fuerzas del Eje en el nº 17 de Marvel Mystery (marzo de 1941).
Martin Goodman era judìo, al igual que muchos de sus empleados y sin duda, su sentimiento antinazi venía dado en parte, por la politica enloquecida del régimen de Hitler. Pero no es menos cierto el hecho de que muchos de los pioneros de Marvel eran jóvenes que habian crecido en barrios dificiles y sabían reconocer a un tirano nada más verlo. Las mismas condiciones que engendraron el fascismo provocaron el nacimiento de una generación que estaba, de buena gana, dispuesta a combatirlo.
Chip Goodman hijo de Martin, comenta que su padre también poseia el hondo patriotismo del hombre hecho a si mismo que ve la ética americana personificada en su propio éxito. Pero no nos engañemos, el conflicto hizo de oro a muchos editores, ya que los comics con tintes patrióticos, alcanzaban tiradas de hasta un millón de ejemplares, de hecho la guerra supuso un balón de oxigeno para las arcas de Timely.
A parte de la nueva serie de Human Torch trimestal durante 1940 y la mayor parte de 1941, Timely publicaba poco más que un número mensual de Marvel Mystery.

Había llegado la hora de que Simon y Kirby presentasen a un personaje de éxito, y lo hicieron, entre bombas que explotaban y banderas que ondeaban al viento, nació uno de los iconos del comic, Captain America.
Este nuevo personaje, fue el principal éxito de Timely durante la Golden Age y uno de los superhéroes más vendidos de todos los tiempos, es sobre todo y ante todo una manifestación de patriotismo.
Por supuesto las tres estrellas de Timely: La antorcha, Namor y el Capi, unieron sus fuerzas para luchar con el enemigo común, aparte sus jóvenes acompañantes Bucky y Toro crearon a un grupo de luchadores de la libertad conocido como Young Allies.


Creados por Kirby y Simon, eran un grupo multirracial de jóvenes patriotas, aparte de los mencionados acompañantes adolescentes de los superhéroes, el equipo estaba formado por cuatro amigos: Knuckles, Jeff, Tubby y Whitewash, que era un chico de color. El fin de la guerra supuso el fin de la mayoria de  los luchadores de la libertad, aunque Marvel supo sacarles provecho dos décadas después.

sábado, 3 de septiembre de 2011

La Tierra contra los Platillos Volantes

Earth versus the Fling Saucers
USA 1956
Director: Ferd F.Sears.
Productora: Columbia Pictures.
Pruductores: Charles H. Schneer y Ray Harryhausen.
Guión: George Worthington y Raimond T. Marcus, sobre argumento original de Curt Siodmak.
Fotografía: Fred Jackman Jr.
Música: Misha Bakaleinikoff.
Montaje: Danny D. Landers.
Efectos especiales: Ray Harryhausen, Russ Kelley.
Intérpretes: Hugh Marlowe, Joan Taylor, Donald Curtis, Morris Ankrum, Harry Lauter.
Duración: 80 minutos B/N.

El trabajo de autor cinematogràfico que ha llevado a cabo Ray Harryhausen  le ha vinculado casi siempre a mundos legendarios y extraordinarios seres a los que dar animación. En este clásico de la ciencia ficción, los efectos especiales se desarrollan en objetos, en este caso en platillos volantes, una labor casi inedita en Harryhausen.
Inscrita por completo a la moda de la invasión extraterrestre, corriente que vio la luz de forma paralela a la guerra fria, hay los suficientes puntos de originalidad e interés para colocar a esta producción en el pelotón de cabeza del género.

En primer lugar, hay que subrayar el rigor, casi documentalista, con el que se relata la aparición, el contacto y la lucha de las fuerzas invasoras, pasos éstos de credibilidad sociopolitica obviada en otras produciones de serie B de argumentos parecidos.
También es simpatica y loable la trama cientifica, con un detallado estudio del mundo de los satélites artificiales y los ultrasonidos, los cuales serán el arma de ataque de los extraterrestres robots a Gor, el ayudante de Michael Rennie en Ultimatun a la Tierra (1951).

 
La concisa narración, milimétrica en su desarrollo, se basa en un argumento de una persona muy afin al fantástico en todas sus facetas, Curt Siodmak, hermano del quizás más respetado Robert. El guión fue escrito, por otro especialista, Goerge Worthiington Yates, autor de La humanidad en peligro (1951) e It Came from Beneath the Sea (1955), donde ya contactó con el binomio Schneer-Harryhausen.
Aunque el uso de la stopmotion, no permitiera una gran espectacularidad aplicada a los platillos volantes, los resultados en pantalla son más que eficaces.

Unido todo a las maquetas de Washington devastado en sus monumentos más reconocibles por las ondas ultrasónicas malvadas, se consiguió realizar una de las peliculas mas entretenidas del género.