Vampirella, fue creada por Forrest J.Ackerman, toda una institución en el
género de la ciencia ficción y creador de la mitica revista Famous Monsters
of Filmland, fundada en los años cincuenta y a día de hoy considerada un
objeto de culto, y por la dibujante Trina Robbins, quién diseñó el vestuario del
personaje.
Por aquel entonces la editorial Warren ya poseia dos revistas de terror como eran Creepy o Eerie; asi surge el 1 de septiembre de 1969 una nueva revista antológica de terror con el nombre de Vampirella, pese al nombre la protagonista no aparecia en las historias sólo hacia la presentación de las mismas, no sería hasta Vampirella # 8 (noviembre de 1970), donde pasaría a protagonizar sus propias aventuras.
Vampirella procede de Drakulon, un planeta de cuyos rios surge la sangre de la cual de alimentan sus habitantes, el planeta vive al borde de la extinción, ya que está a punto de colisionar con dos soles gemelos. Quiere la suerte que una nave espacial humana aterrice en el moribundo planeta, la joven decide investigar a estos extraños visitantes, cuando es atacada por los mismos, descubriendo durante el forcejeo que los humanos están compuestos de sangre, por lo que decide embarcarse en el cohete y venirse a la Tierra.
En nuestro mundo tiene todos los poderes de los vampiros y ninguna de sus debilidades, con un suero que evita su ansia de sangre y acompañada por Adam Van Helsing y su padre un ciego con poderes psiquicos, y un mago de tercera llamado Pendragon, usará sus poderes para el bien, enfrentándose a Caos, un dios maligno y su grupo de acólitos.
Esta serie bebe y bastante del clásico de los 60 Barbarella, ya que ambos paseaban por sus viñetas a unas señoritas muy ligeras de ropa, aunque tan bien influye el movimiento de liberación femenina y la expansión de la libertad sexual que vivió su auge durante la revolución del movimiento hippie y la contracultura.
Vampirella puede llegar a parecer un serial cursi y altamente sexualizado, tanto su origen como su erotismo ligth puede echar a muchos lectores para atrás, sin embargo tiene dos importantes bazas a su favor, como son Archie Goodwin y Pepe González dos autores que se tomaron muy en serio su trabajo y le dieron al personaje dignidad y empaque.
Goodwin escribió para el personaje sus historias más convincente y dramáticas, otorgándole al conjunto un poso de seriedad, que iba más hayá de un macizorra con un escueto bañador y por supuesto esta nuestro Pepe González,
En un principio González trabajó en infinidad de cómics de tipo romántico, tanto para España como para el Reino Unido, destacando por su habilidad a la hora de dibujar la figura femenina, a la que dota de gran belleza y sensualidad. Durante un viaje de Jim Warren por Europa queda deslumbrado por el trabajo del artista y lo escoge para dibujar al personaje, incorporándose al mismo en el nº 12.
Por aquel entonces la editorial Warren ya poseia dos revistas de terror como eran Creepy o Eerie; asi surge el 1 de septiembre de 1969 una nueva revista antológica de terror con el nombre de Vampirella, pese al nombre la protagonista no aparecia en las historias sólo hacia la presentación de las mismas, no sería hasta Vampirella # 8 (noviembre de 1970), donde pasaría a protagonizar sus propias aventuras.
Vampirella procede de Drakulon, un planeta de cuyos rios surge la sangre de la cual de alimentan sus habitantes, el planeta vive al borde de la extinción, ya que está a punto de colisionar con dos soles gemelos. Quiere la suerte que una nave espacial humana aterrice en el moribundo planeta, la joven decide investigar a estos extraños visitantes, cuando es atacada por los mismos, descubriendo durante el forcejeo que los humanos están compuestos de sangre, por lo que decide embarcarse en el cohete y venirse a la Tierra.
En nuestro mundo tiene todos los poderes de los vampiros y ninguna de sus debilidades, con un suero que evita su ansia de sangre y acompañada por Adam Van Helsing y su padre un ciego con poderes psiquicos, y un mago de tercera llamado Pendragon, usará sus poderes para el bien, enfrentándose a Caos, un dios maligno y su grupo de acólitos.
Esta serie bebe y bastante del clásico de los 60 Barbarella, ya que ambos paseaban por sus viñetas a unas señoritas muy ligeras de ropa, aunque tan bien influye el movimiento de liberación femenina y la expansión de la libertad sexual que vivió su auge durante la revolución del movimiento hippie y la contracultura.
Vampirella puede llegar a parecer un serial cursi y altamente sexualizado, tanto su origen como su erotismo ligth puede echar a muchos lectores para atrás, sin embargo tiene dos importantes bazas a su favor, como son Archie Goodwin y Pepe González dos autores que se tomaron muy en serio su trabajo y le dieron al personaje dignidad y empaque.
Goodwin escribió para el personaje sus historias más convincente y dramáticas, otorgándole al conjunto un poso de seriedad, que iba más hayá de un macizorra con un escueto bañador y por supuesto esta nuestro Pepe González,
En un principio González trabajó en infinidad de cómics de tipo romántico, tanto para España como para el Reino Unido, destacando por su habilidad a la hora de dibujar la figura femenina, a la que dota de gran belleza y sensualidad. Durante un viaje de Jim Warren por Europa queda deslumbrado por el trabajo del artista y lo escoge para dibujar al personaje, incorporándose al mismo en el nº 12.
El dibujante aportó su delicado trazo, su habilidad para retratar la belleza
femenina, a la vez que usaba aguadas oscuras en los fondos, que daban a las
viñetas un aspecto fantasmagórico. Sea como fuese, el artista hizo en el
personaje un gran trabajo, que le valió para ser reconocido como el dibujante
más influyente que ha pasado por la serie.
Obra entretenida y de de lectura dinámica, donde el buen hacer de gente como Goodwin y González supera todas las adversidades, ya que ellos supieron darle credibilidad.
En España estas historias fueron publicadas por la editorial Garbo en 1974.
Obra entretenida y de de lectura dinámica, donde el buen hacer de gente como Goodwin y González supera todas las adversidades, ya que ellos supieron darle credibilidad.
En España estas historias fueron publicadas por la editorial Garbo en 1974.
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