I Married A Monster from Outer Space
USA 1958
Director: Gene Fowler jr.
Productora: Paramount.
Guión: Louis Vitess.
Fotografia: Haskell Bogss.
Música: George Tomasini.
Intérpretes: Tom Tyron, Gloria Talbot, Ken Lynch, John Eldrige, Alan Dexter, Jean Carson, Maxie Rosenbloom.
Conduciendo de vuelta a casa tras su despedida de soltero, Bill Farrell (Tom Tyron) detiene su coche al observar un cuerpo en la carretera, siendo atacado por una repulsiva criatura alienígena que instantes después adoptará su misma apariencia. Al día siguiente, el extraterrestre idéntico a Bill ocupa el lugar de éste en su boda con Marge (Gloria Talbot) sin que nadie perciba la más mínima diferencia.
Sim embargo, poco después, la esposa comenzará a advertir con inquietud una actitud excesivamente distanciada y carente de emociones en su pareja.
Un año más tarde, varios vecinos de la pequeña localidad del matrimonio Farrell han sido también suplantados por alienígenas idénticos. Una noche, Marge averiguará la terrible verdad al seguir sigilosamente a su marido hasta el bosque, contemplando cómo adquiere su verdadera apariencia y entra en la nave espacial de la que procede.
Lo cierto es que los extraterre son seres de Andrómeda, obligados a cruzar su especie con la humana, debido a la escasez de hembras fértiles en su lejana galaxia natal. Tras descubrir la verdad, Marge tratará de difundirla entre las gentes del pueblo, pero chocará con el escepticismo general, además de comprobar con horror como la astutos seres han suplantado ya a los habitantes más influyentes.
Por fin, la obstinada y valiente mujer logra reunir a un puñado de verdaderos humanos dispuestos a defender la Tierra y expulsar a los silenciosos suplantadores del expacio esterior.
Una serie B típica del Hollywood de finales de los 50, heredera de la mitica "La invasión de los ladrones de cuerpos" de Don Siegel (1956), aunque sin el empaque y la mala uva de esta. El director Gene Fowler maneja bastante bien la acción, que transcurre en interiores y exteriores diversos, los efectos especiales o defectos segun se mire no son ninguna maravilla pero se dejan ver y en algunos momentos mantienen el tipo (los menos). Una digna hija de la guerra fría y las conspiraciones comunistas en los puebluchos yankees.
USA 1958
Director: Gene Fowler jr.
Productora: Paramount.
Guión: Louis Vitess.
Fotografia: Haskell Bogss.
Música: George Tomasini.
Intérpretes: Tom Tyron, Gloria Talbot, Ken Lynch, John Eldrige, Alan Dexter, Jean Carson, Maxie Rosenbloom.
Conduciendo de vuelta a casa tras su despedida de soltero, Bill Farrell (Tom Tyron) detiene su coche al observar un cuerpo en la carretera, siendo atacado por una repulsiva criatura alienígena que instantes después adoptará su misma apariencia. Al día siguiente, el extraterrestre idéntico a Bill ocupa el lugar de éste en su boda con Marge (Gloria Talbot) sin que nadie perciba la más mínima diferencia.
Sim embargo, poco después, la esposa comenzará a advertir con inquietud una actitud excesivamente distanciada y carente de emociones en su pareja.
Un año más tarde, varios vecinos de la pequeña localidad del matrimonio Farrell han sido también suplantados por alienígenas idénticos. Una noche, Marge averiguará la terrible verdad al seguir sigilosamente a su marido hasta el bosque, contemplando cómo adquiere su verdadera apariencia y entra en la nave espacial de la que procede.
Lo cierto es que los extraterre son seres de Andrómeda, obligados a cruzar su especie con la humana, debido a la escasez de hembras fértiles en su lejana galaxia natal. Tras descubrir la verdad, Marge tratará de difundirla entre las gentes del pueblo, pero chocará con el escepticismo general, además de comprobar con horror como la astutos seres han suplantado ya a los habitantes más influyentes.
Por fin, la obstinada y valiente mujer logra reunir a un puñado de verdaderos humanos dispuestos a defender la Tierra y expulsar a los silenciosos suplantadores del expacio esterior.
Una serie B típica del Hollywood de finales de los 50, heredera de la mitica "La invasión de los ladrones de cuerpos" de Don Siegel (1956), aunque sin el empaque y la mala uva de esta. El director Gene Fowler maneja bastante bien la acción, que transcurre en interiores y exteriores diversos, los efectos especiales o defectos segun se mire no son ninguna maravilla pero se dejan ver y en algunos momentos mantienen el tipo (los menos). Una digna hija de la guerra fría y las conspiraciones comunistas en los puebluchos yankees.
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