La Muerte de Clark Kent.

Omnibus dedicado a Superman que recoje la saga de la muerte de Clark Kent. Lo que primero llama la atención es el aspecto físico del Hombre de Acero, estamos en los 90 y ello se traduce en una frondosa melena y para su alter ego Clark, una cola para recojer el pelo. Aparte también hay cambios en la personalidad del héroe, Superman no es tan poderoso como en décadas anteriores y Clark Kent no es el reportero timorato al que estamos acostumbrados, si no un periodista de éxito, vestido con camisetas ajustadas, compartiendo piso y cama con Lois Lane.
La obra está compuesta de tres arcos argumentales, el primero de los cuales comienza en Smalville, justo cuando aterriza la nave que trae a la Tierra al pequeño Kal-el. La nave llega cargada de radiación y afecta a un niño que está a punto de nacer dentro de un coche, ya que a sus padres no les da tiempo llegar al hospital, el niño es Kenny Braverman.
 Kenny y Clark serán grandes amigos, pero con el paso de los años esta amistad deriva en un odio patológico por parte de Kenny, pues Clark es superior en todo lo que hace, desde ganar en cualquier competición deportiva o conseguir a la chica de la que está enamorado Kenny, Lana Lang.
Con el tiempo y afectado por la radiación que recibio de niño Kenny se convertirá en un poderoso villano llamado Conducto, cuya única meta en la vida es destruir a Clark Kent. Pero no será fácil ya que desconoce que Clark y Superman son la misma persona y por lo tanto indestructibles.
En el segundo arco argumental descubrimos la aparición del cuerpo de otro Superman, que tras las pruebas pertinentes se descubre que es el verdadero Superman, lo que lleva a nuestro héroe de un confin a otro de la galaxia para demostrar que él es el verdadero Hombre de Acero, aunque para demostrarlo casi pierda la cordura.

En el tercer arco argumental (el más interesante), Conducto escapa de la prisión con un secreto, Clark y Superman son la misma persona. Y desde ese momento intentará destruir todo lo que representa algo para Superman, los Kent, Lois lane, Jimmy Olsen, nadie está a salvo de la furia de Conducto.
Pese al baile de guionistas y dibujantes, la obra goza de gran consistencia y homogenidad, tanto en la historia como en la parte gráfica. Para ello se contó con los mejores profesionales que habia en la DC, el resultado sin ser una obra maestra, es un cómic ágil y entretenido.
Una obra totalmente disfrutable, aunque hay que ponerle un pero, el espesor del volumen ya que debido a su excesivo peso se hace incómodo para su lectura; hubiese sido más fácil recopilarlo en dos tomos