jueves, 11 de abril de 2013

La bestia bajo el asfalto

ALLIGATOR
USA 1980
Director: Lewis Teague.
Productora: Alligator Associates/Group.
Produción: Brandon Chase.
Guionista: John Sayles.
Fotografía: Joseph Mangine.
Efectos especiales: Richard O. Helmer.
Intérpretes: Robert Forster, Robin Riker, Michael Gazzo, Dean Jagger, Henry Silva, Bart Braverman.
Duración: 91 minutos, Color.

Moldeados como cineastas bajo la atenta mirada de Roger Corman y graduados con notable en el campo del bajo presupuesto, Lewis Teague y John Sayles han terminado siendo dos figuras más caracteristicas del cine fantástico y de aventuras, el primero con titulos tan reconocibles como Cujo (1983), Los ojos del gato (1985), La joya del Nilo (1985) o Peligrosamente unidos (1991), se ha ganado una reputación de realizador sólido y cumplidor, aunque algo impersonal, ejemplo de profesional competente que poco a poco va perdiendo fuelle según se interna en los entresijos de la industria.
El segundo, a su vez, figura como guionista en algunas de las más estimulantes propuestas de finales de los 70 y principios de los 80 con obras como Piraña (1978), Los 7 magnificos del espacio (1980) o la magnifica Aullidos (1980), además de dirigir, con no poco acierto un puñado de films de tono personal como The return of the Secaucus Seven (1980).
La bestia bajo el asfalto seria la segunda colaboración entre ambos y constituye, sin duda, uno de los titulos más apreciables de sus respectivas cinematografias, Sayles declarado amante de la serie B, parte aqui de la conocida leyenda urbana que asegura la existencia de cocodrilos en las alcantarillas neoyorkinas, multiplicados a partir de una crias que fueron arrojadas hace años por el retrete.
Partiendo de esta simpática premisa, el guionista juega con cuantos estereotipos hicieron entrañables a las monsters movies de los 50; residuos tóxicos que provocaron el crecimiento de una de las bestias, paranoias politicas, terror ciudadano, pero añadiendo además elementos nuevos de no pocas intenciones subversivas, policias corruptos, periodistas y empresarios sanguijuelas, ecologistas luchando por salvar al especimen, lo cual da lugar a un abigarrado y gozoso espectáculo que no desmerece respecto a otros puntos álgidos del  género.
Teague, por su parte, maneja la traviesa trama con pulso firme y a veces con notable inventiva visual, sacando asimismo un  meritorio partido de los actores, sobre todo del aséptico Robert Foster, impecable en el papel de un policia con un oscuro pasado encargado de la caza del enorme animal.
También sobresalen en el reparto la ya crecidita Sue Lyon, el fulminante Henry Silva y el propio Sayles en una de sus breves intervenciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario