sábado, 28 de enero de 2012

Iron Man de Stan Lee y Don Heck

Stan Lee siempre fue un visionario y lo demostró al elegir Vietnam como marco para el origen de Iron Man en Tales of Suspense # 39 (marzo de 1963). Relativamente en aquella época, pocos americanos estaban interesados en el pequeño pais asiático, pero no pasó mucho tiempo antes de que la guerra que alli tuvo lugar se convirtiera en el acontecimiento más decisivo y controvertido de los años sesenta.
Para Stan Lee, aquel escenario sirvió meramente como recurso para introducir a los villanos comunistas, algo muy recurrente en estos primeros años.
Más adelante reconsideraría su tratamiento, un tanto simplista, de los problemas de Vietnam, pero Iron Man era un personaje cuya premisa exigía cierto grado de intriga politica. Tony Stark, el protagonista de la historia es un inventor millonario y fabricante de armas que lleva una vida casi perfecta como un afable playboy, hasta que se ve envuelto en un problema. En el curso de una prueba de armas experimentales en las junglas de Vietnam, es herido por una mina explosiva y capturado por el enemigo.
Moribundo a causa de un trozo de metralla alojado cerca de su corazón, Stark recibe la orden de pasar sus últimos dias inventando nuevas armas para los comunistas, en vez de eso, el héroe que lleva en su interior, crea una poderosa armadura que también usa como marcapasos para mantener su corazón latiendo.
Ya como Iron Man, vence a su enemigos y logra escapar, pero se ve condenado a estar revestido parcialmente de metal hasta el fin de sus dias. La vida de los superhéroes Marvel nunca ha sido un camino de rosas.
Don Heck tuvo el honor de dibujar la primera historia de Iron Man, una oportunidad un tanto extraña, dado que Jack Kirby parecía tener la primera opción sobre casi todos los nuevos personajes. De hecho Kirby intervino en Iron Man en el diseño del traje, ya que fue el encargado de hacer la portada. Aunque Heck no diseñó gráficamente al personaje, si diseñó a Tony Stark y a su secretaria Pepper Potss, siendo su sólido trabajo al frente de la colección lo que situó a Iron Man en el camino hacia el éxito.
Al principio a Heck le costó adaptarse al método Marvel, ya que cuando recibió el primer guión de la historia contaba sólo con las dos primeras y la última página, el resto tenia que completarla el dibujante, lo que le daba la posibilidad de aportar elementos propios a las historias, sin embargo otros muchos dibujantes acostumbrados a guiones completos, no les agradó este metodo y abandonaron Marvel.
La sólida experiencia de Heck en comics bélicos contribuyó a que Iron Man empezase con buen pie, pero el autor no estaba del todo satisfecho con la armadura, su aspecto era demasiado tosco y voluminoso, al poco tiempo pasó del amenazador gris al dorado. Más tarde, fue sustituido por un diseño rojo y dorado, más aerodinámico, obra de Steve Ditko.
Tal vez porque el traje es una máquina, muchos autores han sentido la tentación de modificarlo a lo largo de los años, y a Iron Man más a menudo que cualquier otro superhéroe Marvel.

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