Conan

El primer gran éxito de Marvel de la década de los setenta fue Conan the Barbarian , haciendo su debut en octubre de 1970. Más que una creación de Marvel, Conan era una adaptación, pero la versión en comic-book contribuyó a la fama del bárbaro." No fue del todo idea mía", comenta Roy Thomas, " pero fui yo quien me preocupé del proyecto y por eso acabé como guionista de la serie".
De hecho, fueron las cartas de los fans sugiriendo la posibilidad de dicha serie lo que puso a Thomas tras la pista de Conan, un héroe creado por el escritor tejano Robert E. Howard en el viejo pulp Weird Tales.
Conan, un soldado de fortuna que vagaba por reinos prehistóricos imaginarios poblados por brujos y demonios, era el personaje más famoso del género llamado de espada y brujería. Las historias de Howard habían disfrutado de cierto éxito en reediciones de bolsillo y Thomas comprendió rápidamemte que se adaptarían como un guante al formato del comic.book. " Pense que sería un buen camino a seguir", comenta, "y en cierto modo nos brindaba la opurtunidad de desviarnos del típico material de los super-héroes. Quería ampliar horizontes".

Conan the Barbarian fue en cierta medida, una empresa arriesgada para Marvel. La serie contenía los elementos usuales de acción y fantasía, pero estaba ambientada en un pasado sin ninguna relación con el Universo Marvel y su protagonista era un héroe sin ningun tipo de poderes, con escaso sentido del humor y pocos principios morales. Además Marvel, evitaba las adaptaciones de material "ajeno", debido a la cantidad que había que pagar por los derechos de publicación. "Logré convencer a Martin Goodman (propietario de  Marvel) de que merecía la pena pagar algo de dinero por el personaje", comenta Thomas. "Ese fue mi mayor logro". El riesgo dio resultado, convirtiendose en todo un éxito y animó a Marvel a publicar más series basadas en personajes de otros medios.

El dibujante elegido para ilustrar las aventuras de Conan demostró ser todo un acierto. Barry W. Smith, nacido en  Londres, tenía veinte años cuando empezó a trabajar en el primer número de Conan. Su labor inicial fue ligeramente esquemática, pero su técnica mejoró a pasos agigantados y en pocos meses, había desarrollado un estilo nunca visto en los cómics.
" Se destapó de un modo distinto a lo que yo hubiera imaginado", comenta Thomas, " porque no esperaba que desarrollase aquel estilo a lo art nouveau".
Art nouveau, art déco y prerrafaelista son términos usados con frecuencia para comentar la influencia artística en el trabajo, tremendamente ornamental y detallista de Smith. Su Conan no era tanto un robusto pendenciero, era más bien como una figura esbelta y felina que se movia por paisajes de decadente ensueño.
El dibujo de Barry Smith se complementaba con los guiones de Roy Thomas, a menudo basados en ideas propias más que en el material procedente de Howard. Una extrapolación especialmente afortunada fue Red Sonja, un personaje menor de Howard que Thomas transformó en compañera de armas de Conan.
La bella espadachina se granjeó la popularidad suficiente como par obtener su propia serie de cómics y una pelicula en 1985.
De hecho, el éxito de Conan dio lugar a la aparición de varios títulos de espada  y brujería en diversas editoriales, pero soló el original fue capa de perdurar en el tiempo.